[MUSIC] De acuerdo con la evidencia disponible, las oportunidades educativas pueden propiciarles los diversos agentes sociales implicados en los servicios de salud, dependiendo del tipo de relación que mantienen con el sistema. En primer lugar, los agentes sociales que desempeñamos el rol de usuarios de los servicios de salud podemos establecer dos tipos de relación con el sistema. Una relación reactiva, oportunista, remedial. Cuando acudimos al servicios de salud una vez experimentamos alguna situación que afecta nuestro bienestar. Cuando nos sentimos con malestar. Cuando consideramos que tenemos alguna enfermedad que amerita atención especial. En contextos como el colombiano este tipo de relación es muy frecuente. Las personas tendemos a acudir a los servicios de salud sólo para buscar diagnóstico o tratamiento de alguna afección. Pocas veces recurrimos al personal de la salud si nos sentimos bien. Por ejemplo, en la evaluación que realizamos sobre la estrategia de los servicios de salud amigables para adolescentes y jóvenes en el país. Se encontró que la mayor parte de la población acude a consulta cuando you ha iniciado actividad sexual penetrativa o se ha expuesto a algún riesgo de una infección de transmisión o un embarazo no deseado. La otra alternativa, la denominamos relación proactiva o promocional. La cual se presenta cuando asistimos a los servicios de salud para mantenernos saludables, para cuidarnos y para evitar o controlar cualquier situación que pueda afectar nuestro bienestar. Un ejemplo de este tipo de relación es el de la madre que lleva a su hijo de seis meses de edad al control médico y aprovecha para preguntar sobre cómo debe realizarle el aseo de los genitales. Pues observa que bajo el prepucio se acumula una sustancia blanquecina, es decir, lo que se denomina esmegma. [MUSIC] En segundo lugar, los agentes sociales que laboran en los servicios de salud también pueden entablar con los usuarios del sistema una relación reactiva o proactiva. Se relacionan reactivamente cuando se limitan a dar respuesta a las solicitudes explícitas de las personas que acuden a los servicios y que demandan atención para una dolencia particular. En estos casos, esperan que la persona solicite atención para proveer información, consejería o tratamiento. Detectar, diagnosticar o manejar problemas de salud. Remitir a otro profesional o servicio de salud en caso de ser necesario. De otro lado, se relacionan proactivamente cuando aprovechan cualquier contacto para generar oportunidades de educación en salud y, particularmente, de educación de la sexualidad. La relación también es proactiva cuando propician oportunidades de interacción, cuando generan espacios de conversación, cuando se esfuerzan por encontrar alternativas para contactar a la población e involucrarla en iniciativas de educación de la sexualidad. Con el fin de lograr el objetivo que se propone. La relación también es pro activa cuando el personal de salud se reconoce como un agente social capaz de propiciar cambios en el entorno aprovechando el conocimiento que tienen de los asuntos de la sexualidad y de la población con la que trabajan. La credibilidad que tienen en el medio y el poder que se les atribuye para liderar procesos de educación de la sexualidad, involucrando activamente a los distintos miembros de la comunidad. Por ejemplo, una alternativa proactiva a la que recurren los agentes sociales de los servicios de salud para establecer y mantener relaciones con la población consiste en ubicar los centros de salud y los lugares de estudio o trabajo. También en los centros comerciales, las farmacias, las calles, los parques, los centros deportivos y recreativos de la comunidad. O en cualquier sitio público o privado frecuentado por las personas que pocas veces llegan a los hospitales o centros de servicios por su propia iniciativa. En esos mismos escenarios, el personal de salud también puede involucrar a la población en iniciativas de educación de la sexualidad aprovechando las posibilidades de acceso que ofrece. Ahora bien, sin importar la ocasión que facilitó el contacto, la probabilidad de generar una comunicación efectiva en términos de educación se incrementa si. Uno, los agentes sociales implicados han desarrollado las competencias que se requieren para conversar sobre el tema de la sexualidad sin temores, de manera clara, abierta y directa con base en el conocimiento científico disponible. 2, el contexto en el que nos encontramos nos ofrece, al menos cinco condiciones, privacidad, confidencialidad, equidad, autonomía e integridad. En el curso Sexualidad mucho más que sexo, el objetivo era fomentar la competencia para conversar tranquilamente sobre el tema de la sexualidad. Espero que en este momento te sientas capaz de entablar comunicaciones efectivas acerca de este asunto con cualquier persona y en cualquier contexto. [MUSIC]